Trucos para pagar menos gas y mantener tu casa caliente en invierno

Cuando llega el frío, mantener la casa caliente sin que se dispare la factura del gas puede parecer imposible. Pero con algunos pequeños cambios en tus hábitos y en el uso de la energía, puedes reducir el consumo hasta un 30 % sin pasar frío.Te contamos cómo hacerlo de forma sencilla y sostenible.

1. Aprovecha el calor natural del sol

Durante el día, sube las persianas y abre las cortinas para dejar entrar la luz solar. Por la noche, ciérralas bien para conservar el calor. Las cortinas gruesas ayudan a aislar mejor y reducen las pérdidas térmicas hasta un 15 %.

2. Sella bien ventanas y puertas

Las rendijas y fugas de aire pueden suponer una pérdida enorme de calor. Usa burletes adhesivos, aislantes de goma o incluso barreras de tela en la parte inferior de las puertas. Es un gesto barato que reduce notablemente la necesidad de calefacción.

3. Regula bien la temperatura del termostato

Cada grado cuenta:

• Mantén la temperatura entre 19 °C y 21 °C durante el día.

• Por la noche o si sales, bájala a 17 °C o menos.

Recuerda: subir el termostato no calienta más rápido, solo gasta más gas.

4. Purga los radiadores al inicio del invierno

Si tienen aire acumulado, no calientan bien. Purga todos los radiadores al comenzar la temporada de frío y revisa que no haya fugas o zonas frías. Así aprovecharás al máximo el calor del agua caliente.

5. No tapes los radiadores

Evita poner muebles, cortinas o ropa encima o delante. Obstaculizan la difusión del calor y hacen que el sistema trabaje más. Si puedes, coloca reflectores térmicos detrás de los radiadores para redirigir el calor hacia el interior de la habitación.

6. Aísla lo que puedas

Si tu vivienda no está bien aislada, hay soluciones rápidas y baratas:

• Coloca láminas aislantes detrás de los radiadores.

• Usa alfombras para evitar el frío del suelo.

• Añade burletes en las ventanas.El aislamiento es la mejor inversión a medio plazo: una casa bien aislada puede reducir su consumo de gas hasta en un 40 %.

  
  

7. Revisa la caldera y ajusta su potencia

Una caldera eficiente puede ahorrar entre un 15 % y un 25 % de gas. Realiza revisiones periódicas y ajusta la temperatura del agua sanitaria a 50–55 °C y la de calefacción a 60 °C como máximo.Si tu caldera tiene más de 15 años, plantéate sustituirla por una de condensación, mucho más eficiente.

8. Viste la casa (y a ti) para el invierno

El confort no depende solo del termostato. Usa manta, calcetines gruesos y ropa de abrigo en casa. Además, coloca cojines, cortinas y textiles cálidos: ayudan a mantener una sensación térmica más agradable.

9. Controla el tiempo de ducha

Reducir el tiempo de ducha y usar cabezales de bajo consumo disminuye tanto el gasto de gas como el de agua. Cada minuto menos puede suponer hasta 12 € al año por persona en ahorro energético.

10. Cambia tus hábitos

A veces, el mejor ahorro viene de los pequeños gestos:

• Apaga la calefacción media hora antes de irte a dormir.

• Ventila solo 5 minutos al día.

• Aprovecha el calor residual del horno para calentar la cocina.

Mantener tu hogar cálido no tiene por qué implicar más gasto ni más emisiones. Con pequeños cambios, puedes reducir tu consumo de gas, ahorrar dinero y contribuir a un planeta más sostenible.

Desde Bajatuhuella te animamos a aplicar uno de estos trucos hoy mismo. El planeta (y tu bolsillo) te lo agradecerán.